lunes, 24 de agosto de 2009

Y tu me preguntas porque.

Y tú te preguntas
porqué todavía te espero.
Y tú me preguntas
que porqué todavía te quiero.
Y pensando en todas tus preguntas,
meciéndome en las ramas
del árbol del tiempo,
sonrío pensando en tus ojos.
Y yo te contesto,
que tengo mil razones para esperarte,
que tengo mil motivos para quererte,
que tengo mil y una formas de mirarte.
y tú mientras me escuchas,
sonríes porque te espero
y tú mientras me sientes
te alegras porque te quiero
y tú me prometes con tu mirada
dulce y sincera
que algún día serás rama,
que serás viento,
que tú serás mis alas
que me abracen
y me dejen volar
acariciado por esa suave brisa,
que sale de tus besos.